Las enfermedades emocionales y sus consecuencias.
“Morirse de pena” es un expresión que muestra, de una forma clara y drástica, cómo el conocimiento popular relaciona las emociones con la salud.
A pesar de que esta relación entre las emociones y la salud ha continuado formando parte a lo largo de los años del conocimiento popular, a veces nos resistimos a reconocerlo.
Hoy en día ya casi nadie niega que haya una conexión entre las enfermedades físicas y las emociones reprimidas o sentimientos negativos. Son las llamadas enfermedades emocionales que trata la medicina psicosomática. Cuando se pasa por un momento traumático en la vida, cuando se sienten miedos, estrés, cuando se bloquean las emociones o no se gestionan bien, pueden iniciar o variar el curso de una gran variedad de patologías sean físicas o psicosomáticas.
El cuerpo es el reflejo de los pensamientos y emociones, según sean se segregan químicos que generan placer o estrés. Si las sensaciones son estresantes se segregan sustancias que son tóxicas. Estar estresado significa que tu cuerpo primitivo cree que tienes que pelear o huir. En este estado tu mente subconsciente le da prioridad a tus brazos y tus piernas, justamente para que pelees o corras. Se descuida los órganos vitales que se encuentran en el torso, es decir el flujo sanguíneo no será el optimo, si esta situación de estrés es constante tus órganos vitales se debilitan o incluso enferman.
Por suerte, la relación entre las emociones y la salud no sólo se restringe a un efecto nocivo de las emociones negativas, las emociones positivas tienen un efecto beneficioso, como se está evidenciando, en el caso de la producción de endorfinas, ante emociones placenteras.
¿Cómo te sientes? Hacerte esta pregunta te ayudara a tomar consciente en el presente como son tus sensaciones, pensamientos, emociones en este momento. A partir de la toma de consciencia, sanar estas emociones.
Como dice el conocimiento popular “la risa lo cura todo”
por Angela Suárez